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La importancia de saber quién soy

30 enero, 2019 carmen AUTOESTIMA, identidad, valores

Había 8 niños en el parque y entre ellos se encontraba Raul. Recuerda que todo empezó ahí, cuando estuvo esforzándose por encajar. Para ello, cada tarde, imitaba a sus amigos. Su circulo social era el único en el que sentía que podía encajar. De sus padres recibía una indiferencia continua. Atención para sobrevivir, lo llamaba él, pero nada más. Así que se compraba los juegos que a sus amigos les gustaban, se fijaba en los jugadores favoritos de sus amigos. Empezó a fumar cuando estuvo socialmente aceptado en dicho grupo y así comenzó su desarrollo. 

Siguió creciendo y siguió imitando para encajar. Les imitó en el trato que tenían hacia sus madres, les imitó cuando se acercaba una chica, les imitó cuando tenía que decidir en qué invertir su tiempo. 

“Raul, lo importante es que sigas teniendo tiempo para salir y eso. Una ingeniería te encierra tío” –  dijo Luis. 

Y Raul nunca fue ingeniero y nunca trató a esa chica como pensó que debería y la relación con su madre se estropeó un día en el que él no decidió. Y finalmente acabó sin poder contestar a la pregunta de quién soy yo, qué me gusta, qué es importante…

Raul nos conoció hace dos años. Vino a terapia porque estaba en un momento de su vida en el que todas las decisiones de otras personas le habían hecho perderse. Vino y no entendió cuando le preguntamos: Y tú, ¿Qué quieres? ¿Quién eres? (Nos justificaba sus decisiones con ejemplos de otras vidas). Nos costó volver a crear esa definición, examinar qué pensamientos habían creado ese comportamiento, intervenir en relaciones que se habían creado desde esa necesidad de atención y aprobación y desarrollar habilidades que le permitiesen no volver a cometer el error de no escucharse.

Cuando no te conoces no puedes crear una autoestima robusta. Ese es el primer paso para el desarrollo de una buena autoestima. El autoconocimiento. 

Las gafas del autoconocimiento nos permiten tener información y saber cómo pensamos, cuáles son nuestras fortalezas y cuáles son nuestras áreas de mejora. Te permite entender y evaluar tus comportamientos y saber si estás alineado con tus valores , tus talentos, tus intenciones… 

Para explicar y ahondar un poco más en el concepto del autoconocimiento os traemos la pirámide de Robert Dils. Un iceberg de conocimiento que nos ayuda en la tarea del autoconocimiento, y nos descubre los motivos de porqué hacemos lo que hacemos, para darnos cuenta de si estamos alineados con nosotros mismos.

Para entender bien este iceberg es importante tener en cuenta:

  1. Que cada nivel necesita la información del nivel inmediatamente anterior. Es decir, para realizar un comportamiento, por ejemplo, se necesita poseer una serie de aptitudes y actitudes. 
  2. Los cambios en los niveles más profundos tendrán cambios en los niveles superiores. Es decir, un cambio de valores afectará en tu comportamiento. 
  3. Un cambio de comportamiento o un desarrollo de aptitudes no afectará en tus valores a corto plazo pero podría hacerlo a largo plazo. 

Por otro lado, queremos dejar unas explicaciones sobre los diferentes niveles: 

  1. Entorno: Nos referimos con entorno al espacio físico donde entramos en contacto con los demás. 
  2. Conductas: Nuestro comportamiento, nuestras acciones.  Es la parte que se ve de nosotros y la que vemos de otros. Es el nivel en el que nos relacionamos. 
  3. Actitudes: Es la predisposición con la que nos presentamos a las acciones que vendrán después. 
  4. Aptitudes: Este nivel responde a las capacidades y habilidades que tenemos para realizar los comportamientos. 
  5. Creencias: Es el concepto que creamos sobre nosotros y sobre las cosas. Son modificables. Trabajamos mucho con las creencias en terapia ya que es lo que nos puede ayudar a generar un cambio profundo y verdadero) Las creencias argumentan nuestros comportamientos.
  6. Valores: Es lo que conocemos como nuestros principios. Donde solemos encontrar la lealtad, la justicia…etc. Puede llegar a generar emociones muy intensas. También pueden ser una verdadera fuente de motivación.  Una buena pregunta para encontrar nuestros valores sería: ¿Qué hay de importante en lo que estoy  haciendo?

Con todo este conocimiento se crea tu identidad. El resultado de lo adquirido tras todo el proceso. Lo que nos ayudará a contestar a la pregunta de quién soy y nos permitirá desarrollar una personalidad fuerte. 

Esperamos haberte ayudado con esta información, tal y como ayudó a Raul para construirse de nuevo. Esto te ayudará a comprenderte un poco más y a darle sentido a tus comportamientos y conductas.

“Puedo enseñarle a cualquier persona cómo conseguir lo que quiere en la vida. El problema es que no puedo encontrar a quien pueda decirme qué es lo que quiere” – Mark Twain

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